EE UU: La lucha por el aumento del salario mínimo

Hay una gran cantidad de actividad y murmullo alrededor de la lucha por elevar el salario mínimo en los Estados Unidos. Aquí proporcionamos un artículo escrito por Tom Trottier de Socialist Appeal de EEUU, que explica el papel de los salarios bajo el capitalismo y lo que realmente se ha logrado hasta hoy.

¿Cómo se determinan los salarios bajo el capitalismo?

El valor de una mercancía está determinado por la cantidad promedio de fuerza laboral socialmente necesaria para producir o reemplazar ese artículo. En el capitalismo los trabajadores son tratados como mercancías, ya que vendemos nuestra mano de obra por un salario.

Por lo tanto los salarios se aproximan a lo que se necesita en un año dado (en muchos países se calcula el salario por periodos de años) para sostener al trabajador y a su familia, con el fin de que sigan desempeñando sus labores y de producir a la siguiente generación de trabajadores. Esto, por supuesto, varía a través del tiempo, lugar y las condiciones de vida alcanzadas atraves de la lucha de clases en el país en cuestión. El costo de mantener a un trabajador y a su familia en Estados Unidos ahora es más elevado que, por ejemplo, en India actualmente, o en los mismos Estados Unidos en 1914. Algunos salarios específicos pueden ser más altos o bajos que el valor de la mano de obra, donde la oferta y la demanda de trabajo y la organización consciente de la clase obrera o la falta de esta, puede llevar los salarios por arriba o por debajo del valor promedio en un momento dado.

¿Por qué están algunos empleos mejor pagados que otros?

Una vez que una persona es contratada por un capitalista, tiene que ser capaz de hacer el trabajo. Trabajos no cualificados llevan poco o ningún adiestramiento y el jefe puede contratar a cualquier persona y decirle “Toma el trabajo”. Otros empleos requieren cierto tipo de habilidades, saber cómo hacer algo, experiencia y educación. Esto significa que el tiempo y el trabajo que lleva alcanzar estas habilidades aumenta el costo de reemplazar a este trabajador, por ello el salario es alto. Pensemos por ejemplo en electricistas y fontaneros, quienes tienen que pasar por una escuela vocacional y de aprendizaje con el objetivo de especializarse.

¿Qué papel desempeñan los sindicatos en el aumento de los salarios?

Los sindicatos unen a los trabajadores en una fuerza que puede parar la producción y detener la obtención de ganancias por parte del patrón. Como resultado, los trabajadores sindicalizados pueden ganar más en salarios y beneficios sociales.

El trabajador sindicalizado promedio es pagado actualmente con 3,51 dólares más por hora en salario y gana 7,11 dólares más por hora en beneficios sociales, comparado con los empleados no sindicalizados, a pesar de que los patrones a veces aumentan las compensaciones para los empleados no sindicalizados cuando se ven amenazados con una posible sindicalización.

¿Por qué los salarios están disminuyendo para la clase trabajadora?

Sin embargo, como Marx explicó, dichos incrementos a menos que sean defendidos y ampliados son una situación temporal. En términos simples, los sindicatos pueden traer algunas reformas pero los capitalistas responderán a largo plazo para quitárselas. Salarios más altos, beneficios sociales y mejores condiciones laborales elevan el costo de mano de obra (si todas las demás cosas permanecen igual) y esto disminuye la plusvalía (ganancias) de las que el capitalista vive. Por lo tanto, el capitalista busca maneras de reducir los salarios y beneficios para los trabajadores, debilitando y destruyendo sindicatos, o moviendo la producción hacia lugares con mano de obra barata. Esto explica el motivo de trasladar producciones a la mayoría de países del sur o subdesarrollados donde el costo de vida es muy bajo y donde la protección laboral virtualmente no existe. Esto eliminó millones de empleos con altos salarios en los Estados Unidos, y presionó sobre los sindicatos de trabajadores que quedaron para que dieran “marchas atrás”. La única manera de salir de esta miserable elección es desafiar al sistema capitalista por completo.

¿Cómo la lucha por un aumento al salario mínimo se conecta con la lucha por aumentos salariales en general?

En el pasado, el movimiento obrero luchó por un salario mínimo nacional, y este fue finalmente concedido por el gobierno capitalista de Franklin D. Roosevelt en 1938. El salario mínimo se estableció en 0,25 dólares por hora, cerca de 4,23 dólares por hora en la moneda actual. Esta batalla fue para ayudar a elevar el salario de los obreros peor pagados, y así posiblemente ayudar a influir a corto plazo en toda la clase trabajadora. Hubo una serie de aumentos del salario mínimo después de 1938, y fue de 1,60 dólares la hora en 1968 (cerca de 10,96 dólares en moneda actual) y si el salario mínimo se hubiera mantenido al alza junto con la productividad del trabajador desde 1968, este sería aproximadamente de 22 dólares. Actualmente, el salario mínimo federal es de solamente 7,25 dólares por hora.

La segunda guerra mundial creó una fuerte escasez de mano de obra, ya que muchos hombres y mujeres fueron enviados al extranjero, y la producción de guerra redujo grandemente el desempleo. El boom capitalista de la postguerra de 1945 a 1974 creó circunstancias favorables para los obreros estadounidenses, y las condiciones de vida promedio se elevaron acompañadas de alzas en los salarios y beneficios sociales. Sin embargo, el capitalismo tiene contradicciones inherentes, y durante una expansión se plantan las semillas de las futuras crisis atraves de la sobreproducción. Esto terminó con el boom de la postguerra. También con los aumentos de salarios y beneficios sociales, esto (junto con el aumento de inversión en maquinaria) se tiende a reducir la tasa de ganancia. El capitalista entonces toma medidas para reducir el costo de mano de obra para recuperar su tasa de ganancias. Esta fue la razón de que en los años 1970 comenzaran en los Estados Unidos las demandas por “dar marcha atrás” en los convenios colectivos de trabajo. Esta fue también la razón de que el salario mínimo comenzara a perder su valor y a no estar acorde con las tasas de inflación. Los grandes empresarios necesitaban que los sueldos fueran reducidos para incrementar su margen de ganancias.

¿Cómo puede conseguirse un salario mínimo que realmente mejore la vida de los trabajadores?

Una formula muy útil para determinar el punto de partida para un salario mínimo que realmente ayude a los trabajadores con bajos salarios, es el de dos tercios del salario promedio por hora. Esto llevaría a cerca de 16 dólares la hora, y debemos de agregar que tiene que ir acompañado por COLA (cost of linving adjusments-por sus siglas en ingles, ajustes en el costo de vida para asegurar aumentos de salarios acordes con la inflación). Estos 16 dólares por hora – ajustados a la tasa de inflación – deben ser puestos en práctica de inmediato, cualquier aplicación gradual significaría que el salario perdería su valor real debido a la inflación. La clave para triunfar son los sindicatos de los trabajadores unidos. Todos los sindicatos involucrados juntos, más de 13 millones de miembros, jubilados, sus familias, amigos, y vecinos – junto a los millones de trabajadores no organizados, tienen un gran poder potencial. Los dirigentes obreros deben tomar la dirección en esto. La única manera de alcanzar esto es romper con los partidos de las “grandes empresas” y apoyar candidatos laboristas independientes en las próximas elecciones. Un candidato obrero estaría comprometido con aceptar el salario demandado por los trabajadores si es elegido, y a luchar por el salario mínimo de $16-por-hora y por aplicar el COLA, así podría derrotar a varios de los odiados políticos de los dos grandes partidos.

Pero la directiva de AFL-CIO no está haciendo esto. Ellos luchan por aumentos muy pequeños del salario mínimo y sus políticas están basadas en recurrir a los Demócratas y Republicanos ¿Qué podemos hacer?

Si, la actual directiva de la central sindical AFL-CIO (Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales, por sus siglas en inglés) acepta el capitalismo y la lógica del sistema. Sus demandas no están basadas en las necesidades de la clase trabajadora, en lo que es “realista” es en el capitalismo y sus políticos. Los miembros de base tienen que organizarse en sus sindicatos para cambiar estas políticas y poner a la dirección en su lugar o reemplazarla. Las políticas de la dirección sindical son “demasiado poco y demasiado tarde” y el verdadero valor del salario mínimo continúa en declive así como los salarios en general. Esto puede ser revertido y lo será, si tenemos la estrategia correcta.

¿Cómo reaccionarán las grandes empresas a un aumento del salario mínimo?

Aceptemos que los líderes laboristas establezcan un partido obrero de masas, ganan el control del gobierno y un salario de $16 por hora es instituido ¿se quedaran allí las grandes empresas de brazos cruzados y lo pagarán? Ambos, la historia y los acontecimientos actuales, muestran que los capitalistas lucharán contra cada reforma que los trabajadores demanden, hasta incluso sabotearla. Venezuela es un particular buen ejemplo. Los patrones podrían intimidar a los trabajadores y despedirlos. Ellos amenazarán con llevarse sus producciones a donde sea. Contratarán ejércitos de abogados para encontrar vacios legales para evitar cumplir con la nueva ley. En otras palabras, esto se trata de mucho más que una ley del salario mínimo. De lo que se trata es de defender seriamente todos los intereses de los trabajadores, el movimiento laborista tiene que entender que luchar por el aumento del salario mínimo es también luchar por el socialismo. Un gobierno de la clase trabajadora podría nacionalizar las 500 corporaciones más grandes, para funcionar democráticamente bajo control obrero en el interés público, así como cualquier otra compañía (incluidas las llamadas “sin fines de lucro”) que se atrevieran a amenazaran con despedir o, que de cualquier forma, no cumpliera con el nuevo salario mínimo. Los obreros de cada centro o lugar de trabajo necesitará estar organizado y vigilante para defender sus intereses.

¿Qué hay acerca de la nueva ley de salario mínimo en Seattle?

Seattle mostro que si las personas se movilizan y luchan por un cambio, los políticos burgueses harán algunas grandes concesiones, pero a largo plazo ellos trataran de cooptar (elegir ellos o imponer a sus futuros líderes) al movimiento. La victoria electoral inesperada de Kshama Sawant , Alternativa Socialista,   para el ayuntamiento de la ciudad de Seattle bajo la plataforma de un salario mínimo de $15 por hora, mostró cuán cansados están los trabajadores del status quo. Esto, combinado con el referendo para aumentar el salario mínimo en SeaTec, un barrio de la ciudad, donde el aeropuerto de Seattle está ubicado. La campaña “15 Now!” (“¡15 Ahora!”) fue lanzada como secuela de las elecciones, y recibió mucho apoyo popular.

En respuesta, la alcaldía Demócrata y el ayuntamiento de la ciudad aprobaron un proyecto de ley que nominalmente establece el salario mínimo en $15 por hora, pero solamente para algunos trabajadores, y la cual no será completamente aplicado hasta el 2017 (recuerden: en tres años, $15 valdrán menos que ahora). El plan aprobado también instituye una serie de clasificaciones desiguales y contrarreformas descaradas, tales como un sub-salario mínimo para jóvenes y trabajadores discapacitados, incluir propinas y beneficios sociales de cuidado de la salud, dentro del salario mínimo, y su aplicación en un plazo más largo para aquellos que trabajen para un patrón que tenga menos de 500 empleados.

Lamentablemente, Sawant ayudó a preparar el escenario para estas concesiones cuando ella hizo dos cosas. Primero, se unió al comité de asesores sobre salario mínimo del alcalde, conformado por representantes de empresas y de los sindicatos, depositando ilusiones en que tal comité trajera el salario mínimo a través de una serie de negociaciones, con la colaboración Patrono-empleado, en lugar de que fuera el resultado de la lucha de clases. Segundo, la misma Sawant propuso la aplicación gradual del salario mínimo de $15 para los trabajadores de compañías que tuvieran menos de 250 empleados y para las compañías llamadas “sin fines de lucro” (muchas de las cuales son enormes compañías con ejecutivos bien pagados y trabajadores con sueldos bajos). Esto dividió a la clase obrera, precisamente cuando la máxima unidad era necesaria.

En lugar del “¡15 Ya!” se convirtió en “$15 para algunos, un poco menos para otros, gradualmente aplicado en un periodos de años”, Al final Sawant realmente apoyó la “moderada” propuesta pro-empresarial del alcalde, que luego hizo pasar como una gran victoria para el socialismo y un modelo para ser imitado nacionalmente. Esto refleja una colaboración de clases y un enfoque reformista, tratando de reparar al capitalismo, con una pequeña reforma a la vez, negociando con la clase dominante, en lugar de organizar a los trabajadores para transformar el sistema entero. Los verdaderos socialistas siempre dirán la verdad: Ninguna reforma puede ser alcanzada, a menos que el sistema sea cambiado, estamos adheridos al capitalismo y esto significa horror sin fin. No hay atajos para lograr esto.

Acerca de los pequeños negocios y su capacidad para pagar un salario mínimo más alto

Muchos negocios pequeños se quejan acerca del pago del salario mínimo, pero sus quejas no significan que no puedan afrontarlo, significa que las ganancias de algunas de estas personas de negocios serán un poco bajas. Un gobierno obrero buscaría incluir estos pequeños negocios dentro de la economía planificada socialista, así ellos tendrían clientes para sus bienes y servicios, acompañados de créditos accesibles. Si una pequeña empresa socialmente necesaria puede mostrar, rindiéndoles cuentas a los trabajadores, que el aumento del salario los forzaría a cerrar, entonces el gobierno obrero es posible que aplicara exenciones de impuestos, y en algunos casos incluso subsidios para permitirles que sobrevivan. También se podría darles la opción de integrarse voluntariamente a una economía planificada más amplia, donde las economías de escala podrían reducir este tipo de dificultades. Sin embargo los trabajadores no deberían ser los únicos que paguen la “situación difícil” de sus patrones.

¿Puede el “15 Now!” y campañas similares lograr realmente el aumento salarial?

El hecho de que la directiva de la AFL-CIO no tome acciones para invertir los recursos necesarios en movilizar a las personas por un aumento al salario mínimo ha creado un vacío. El Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU, por sus siglas en inglés) ha lanzado las campañas “Lucha por los 15” y “Fast Food Adelante” [en relación a los empleados de negocios de comida rápida, NdT] y pequeños grupos similares como “¡15 Ahora!” han sido organizados alrededor de este hecho. Esto es algo bueno. Sin embargo estas campañas perderán efectividad, si no le dicen la verdad a todos los involucrados. El verdadero poder para cambiar la sociedad está en todo el movimiento obrero no en pequeños grupos que surgen de la noche a la mañana. Estos grupos deben de guiar a los trabajadores hacia los sindicatos y su dirección, ayudando a transformarlos en organizaciones de lucha para romper con los Demócratas y los Republicanos, y construir un partido obrero de masas. De lo contrario, los líderes laboristas seguirán con sus excusas para no hacer nada. Por ejemplo, en un folleto de “¡15 Ahora!” se dice: “La única manera en que podemos derrotar el poder corporativo norteamericano es construyendo una campaña masiva de apoyo popular con los vecindarios locales y grupos en los campus, reuniones en los ayuntamientos, mítines masivos y huelga.”. Desafortunadamente, esto es engañoso, ya que esto implica que el movimiento de masas se puede construir con fuerzas muy pequeñas, no hace mención a la única fuerza que en realidad hace el trabajo: el movimiento obrero.

Muchas personas saben que esta será una dura y larga lucha. La lucha por un aumento significativo del salario mínimo va de la mano con la lucha por cambiar a la sociedad. Si estás listo para esta lucha a largo plazo, ¡contáctanos!